Los Tigres de Detroit están a un juego de avanzar a la Serie de Campeonato de la MLB por primera vez desde 2013, tras vencer a los Guardianes de Cleveland 3-0 en el Juego 3 de la Serie Divisional de la Liga Americana. Dominando tanto en la ofensiva como en la defensiva, el equipo no permitió daño alguno, brindando una emocionante experiencia a los fanáticos en Comerica Park, donde no se había disputado un juego de postemporada en una década.
El lanzador Keider Montero tuvo un inicio brillante, retirando a los mejores bateadores de los Guardianes en solo seis lanzamientos. Posteriormente, Brant Hurter entró al juego, lo que provocó una serie de movimientos tácticos de ambos equipos. A pesar de que los Guardianes conectaron cinco sencillos en 16 turnos ante Hurter, no lograron conseguir el hit decisivo.
Con esta victoria, los Tigres se colocaron en una posición de control en la serie, dejando a los Guardianes con una sequía de 20 entradas sin poder anotar, desde la séptima entrada del Juego 1. Ahora, los Guardianes tendrán una última oportunidad para empatar la serie y forzar un quinto juego, aunque los Tigres parecen estar más motivados que nunca, listos para tratar el siguiente juego como una verdadera eliminatoria.
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