Alex Rodríguez y Manny Ramírez, dos de los mejores bateadores en la historia de las Grandes Ligas, se enfrentan a desafíos para ingresar al Salón de la Fama debido a sus vínculos con el uso de sustancias para mejorar el rendimiento (PEDs).
A-Rod, quien jugó 22 temporadas en las mayores y acumuló impresionantes estadísticas, ha visto crecer el apoyo de los votantes en sus apariciones en las boletas del Salón de la Fama. En su tercera aparición, tiene un 41.0% de apoyo, pero enfrenta barreras significativas debido a su suspensión de 162 juegos por doping en 2014 y su conexión con el escándalo del laboratorio Biogénesis.
Manny Ramírez, otro bateador destacado, cuenta con un 38.5% de apoyo en su octava aparición en las boletas del Salón de la Fama. Su legado ofensivo es impresionante, pero sus positivos por sustancias prohibidas y su reputación de jugador problemático han afectado sus posibilidades de ingreso.
Ambos jugadores han reconocido sus errores y los obstáculos que enfrentan para ser incluidos en el Salón de la Fama. Sus vínculos con el uso de esteroides han generado debates sobre la inclusión de jugadores relacionados con PEDs en el recinto sagrado del béisbol.
A pesar de sus destacadas carreras y estadísticas, la controversia en torno al uso de sustancias para mejorar el rendimiento ha eclipsado su legado y ha puesto en duda su elegibilidad para el Salón de la Fama.
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